viernes, 1 de enero de 2010

Creo creo, ¿qué crees?

Yo creo lo que veo, dicen los excépticos, pero, ¿están realmente seguros de lo que ven? Tal vez sería mejor deconstruir la percepción sensorial de la vista antes de hablar.
La religión y la superstición no son las únicas fuentes de las creencias, la razón está a menudo anclada en categorías como "es normal que los padres quieran a sus hijos" que no solo son falsas si no que provocan una cadena de falsos razonamientos, que podríamos llamar fundamentos, pues sirven más para fundamentar que para razonar.
Para los que pensamos nos es muy tedioso ver una película o leer un libro basado en estos fundamentos llamados "normales". X=Y e Z=L. De hecho nos parece una locura, imposible de entender a no ser que tengas a un creyente a tu lado que te explique: Claro, es que X hace esto porque es un hombre (algo que podría interpretarse como porque es un ser humano o porque es un ser humano de sexo masculino).
Y esto no es solo en el plano metafísico y filosófico, también las acciones cotidianas están llenas de estos irracionales fundamentos: "¡¿La tortilla de patatas sin pan?! No me la puedo comer".
Algunos de estos fundamentos racionales crean teorías divertidas: Una amiga pregunta a un amigo si otro hombre es guapo. Aquel responde: "No sé, no soy gay" Y se queda tan feliz. La teoría es la siguiente: como soy un hombre que prefiere tener relaciones sexuales con las mujeres porque me creo heterosexual no puedo opinar sobre la belleza de otro hombre, en cambio sí puedo opinar sobre la belleza de la música, de un teléfono móvil, de un coche, de unos vaqueros... En cambio, paradójicamente, las mujeres sí pueden opinar sobre la belleza sin quedar de homosexuales por ello. En la cuestión de los géneros, hombre y mujer, hay millones de creencias estúpidas como esta.
Se podría deducir que las creencias no son más que tonterías que uno dice para evitar pensar en cosas embarazosas o que creemos embarazosas o el a ver si voy a decir esto y el otro va a pensar que. En este caso el otro lo más seguro es que no piense sino que sea un creyente más.
En este blog no pretendemos categorizar sobre nada, tampoco fundamentar, solo pensar y como solo pensaremos tal vez nos equivoquemos muchas veces:)